Interesante aplicación le han encontrado los científicos a los posos del café, que debido a la gran cantidad que se genera diariamente, pueden llegar a ser un importante recurso si se le da alguna utilidad.
Los investigadores han moldeado los posos de café con forma de filtro esponjoso que absorbe metales pesados del agua. El diseño y las pruebas iniciales se describen en la revista de la Sociedad Americana de Química e Ingeniería Química Sostenible. «Este producto puede ayudar a reducir los residuos que generamos», dice el científico principal Despina Fragouli, un científico de materiales del Instituto Italiano di Tecnologia.
Nosostros ya usamos los posos del café para muchas cosas, como por ejemplo fertilizante para las plantas o contra las hormigas, pero esto parece mucho más útil. Los productos químicos del café, tales como ácidos grasos, celulosa, y polifenoles, se unen a los metales pesados de la misma manera que lo hace el carbón activo. Mediante la adición de azúcar y de silicona para el café, los investigadores fueron capaces de fabricar un ladrillo tipo «Bob Esponja» que se mantiene unido por sí mismo y que es fácil de usar como filtro.
Una pieza de 200 miligramos fue capaz de eliminar el 99% de mercurio y plomo. Espectacular y un uso realmente interesante para algo que la mayoría de nosotros sólo consideramos que son desechos.
Fuente: Popular Science